La formación de extrema derecha se querelló por calumnias contra Carlos Aurelio Caldito el exvicepresidente de Vox en Badajoz, pero el tribunal avala su palabra y archiva la querella al presentar una prueba.
Vox se querelló contra Carlos Aurelio y un medio que se publicó su denuncia de afirmaba que las cuotas de los afiliados acaban en una cuenta personal de Iván Espinosa de los Monteros, diputado por Vox en Madrid.
El exvicepresidente de Vox en Badajoz y afiliado al partido hasta mediados de 2018, presentó como prueba un recibo bancario que obtuvo durante su etapa en el partido en el que consta «concepto pago cuotas, beneficiario Iván Espinosa«, al que ha tenido acceso Vozpópuli.
La jueza Susana Trujillano, del juzgado de instrucción Nº07 de Madrid ha admitido este recibo como prueba para desestimar la querella del partido contra su exvicepresidente, contra la consejera delegada y el presidente de Su Este Empresa Editorial SL y, por último, el director de La Tribuna de España, Josele Sánchez.
«Los artículos periodísticos base de la querella no contienen imputaciones delictivas concretas, incluso cuando se afirma que las cuotas de los afiliados van a la cuenta personal de Iván Espinosa de los Monteros se acompaña parte de resguardo bancario donde consta concepto PAGO CUOTAS, beneficiario Iván Espinosa»
Espinosa ha esgrimido que la prueba del recibo «es fabricada, que quien sea puede poner su nombre al hacer una transferencia en una cuenta» y que «seguramente» tomarán medidas al respecto.
Desde Vox afirman que la información es falsa y que emprenderán acciones legales ante la publicación de esas calumnias.
Aurelio declaró que “Mi exmujer me denunció en múltiples ocasiones. En varias fui absuelto y en otras no lo logré por la sencilla razón de que había jueces y fiscales que me la tenían jurada».
«Tuve una orden de alejamiento de mi hija durante medio año y arresto domiciliario. Naturalmente no me dieron opción, ni siquiera a defenderme”.
“En España, cualquier cosa, de lo más insignificante, es motivo de acusación de violencia sobre una mujer. Desde una simple discusión acalorada, hasta un insulto, o hasta un pedo. Hay sentencias por cosas semejantes”.
“Entré a Vox por recomendación del juez Serrano”.
Preguntado sobre si antes de presentarse al Senado en Vox sabían que había sido denunciado y condenado, Carlos Aurelio afirma: “¡Pues claro! Nos ha jodido que lo sabían. Yo nunca lo he ocultado. Pues faltaría más. Yo nunca lo he ocultado. ¡Cómo si hurgas en todos los partidos, tiene que haber gente a puntapala!”