Más de 200 viviendas de Madrid han sido vendidas con inquilinos con contrato en vigor que se quedarán en la calle.
Según adelanta ‘El País’, los 14 inmuebles pertenecían a ‘Fusara’ gracias a la herencia de dos familias ricas. Fusara (Fundación de Santamarca y de San Ramón y San Antonio) es una fundación que custodia la Iglesia, y vendió las viviendas el pasado 30 de Julio.
El cometido de la fundación es “educar a menores de edad carentes de medios económicos con enseñanza católica”.
[wp_show_posts id=»32293″]
Fusara está formada por seis miembros: el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro; el alcalde, José Luis Martínez-Almeida; la delegada del Gobierno, Paz García Vera; el decano del Tribunal de la Rota, Carlos Manuel Morán, y dos sacerdotes de Madrid.
Si la justicia no lo remedia a los inquilinos de estas más de 200 viviendas repartidos en 14 bloques se les desahuciará.
Lo inquilinos nos tienen contratos de rentas antiguas y otros, en su mayoría, por debajo del precio de mercado.
[wp_show_posts id=»32308″]
Con sus mensualidades se mantenían los centros educativos con los que aún cuenta la fundación Fusara.
Los inquilinos se han organizado para hacer una denuncia colectiva contra usara porque les aseguró que las viviendas no serían vendidas. Muchos de ellos realizaron obras para reformar las casas con la aprobación de la fundación, y tras hacer el desembolso ahora ven como también esa inversión no será para su beneficio.