La multinacional Burger King ha anunciado que tras haber cerrado sus establecimientos al público, paraliza también su reparto a domicilio en España tras el decretado estado de alarma.

Burguer King ha emitido un comunicado en el que informa de que “esta decisión ha sido adoptada tras valorar las mejores alternativas para mantener el empleo tan pronto como finalice esta situación y garantizando la estabilidad de la compañía”.

La empresa procederá a presentar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) a sus 14.000 trabajadores españoles tras el cierre temporal por la crisis del coronavirus.

La empresa cree que esta es la mejor opción para proteger tanto a empleados como a clientes y ha recomendado que el resto de franquiciados hagan lo mismo.

Burger King ha agradecido a sus empleados el esfuerzo realizado en estos «difíciles momentos» y ha trasladado la total confianza de que la marca retomará su actividad habitual cuando se detenga la propagación del virus.

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