Ayer martes se produjo una gran explosión en un almacén portuario de Beirut que contenía miles de toneladas de nitrato de amonio sin medidas de seguridad y que ha dejado al menos 100 muertos y 4.000 heridos.
El primer ministro del Líbano, Hasan Diab, ha declarado ante el Consejo Superior de Defensa que «es inadmisible que un cargamento de nitrato de amonio, estimado en 2.750 toneladas, se halle desde hace seis años en un almacén sin medidas preventivas».
Los daños causado se estiman entre 3.000 y 5.000 millones de dólares, miles de personas han perdido sus hogares y los hospitales, que ya estaban desbordados por el coronavirus, se encuentran colapsados, por lo que Diab ha pedido ayuda internacional para hacer frente a la situación.
Aunque el primer ministro libanés apuntaba como origen de la explosión una chispa de origen desconocido, las primeras investigaciones barajan la posibilidad de que fuese un incendio en un almacén de fuegos artificiales el que provocase la tremenda explosión.
Este martes por la noche el Consejo Supremo de Defensa libanés declaró la zona como catastrófica y el Gobierno está considerando decretar estado de emergencia en Beirut durante un periodo de dos semanas. Además, este miércoles el país ha entrado en su primer día de luto oficial.
La brutal explosión que provocó un temblor como un terremoto y causó un enorme hongo de humo naranja y gris provocó graves desperfectos en todas las zonas próximas al puerto, que se extendió a los barrios de Ashrafiye, Gemayze y Mar Mekhayel.
La pérdida del puerto, principal puerta de entrada al país, supondrá un problema más a la hora de hacer frente a la crisis que sufre Líbano. La moneda nacional se encuentra en caída libre respecto al dólar y sufre una hiperinflación sin precedentes y despidos masivos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contradiciendo la versión de las autoridades locales, ha apuntado como motivo de la explosión a algún tipo de bomba y señalaba que: «Me he reunido con algunos de nuestros grandes generales y ellos parecen sentir que fue un ataque. Esto no fue un suceso tipo una explosión industrial».
