La Fiscalía Anticorrupción ha entregado al juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, encargado del caso Villarejo, un escrito en el que solicita la imputación del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.
Anticorrupción ha hallado indicios de un presunto delito de cohecho y revelación de secretos relacionados con los trabajos que Villarejo realizó para la compañía de energía entre el año 2004 y el 2017.
Según la fiscalía, la compañía contrató a Villarejo para conseguir información que favoreciera a los intereses de la empresa a la hora de realizar proyectos. También se han encontrado unas grabaciones relacionadas con el sabotaje realizado en la central de Cádiz.
Esta imputación se suma a la de Isidro Fainé (expresidente de CaixaBank) y Antonio Brufau (presidente de Repsol) en el Caso Tándem.