La orden de monjes benedictinos, encargados de la gestión del Valle de los Caídos lleva desde 1957 sin presentar cuentas presupuestarias al Gobierno a pesar de los pertinentes requerimientos, algo que por lo que el Gobierno ha tomado una decisión.
El gobierno se ha negado a transferir dinero a las arcas de los monjes hasta que presenten sus cuentas.
El diario.es ha informado que los monjes podrían dejar de percibir 1,3 millones de euros de negarse a la solicitud del gobierno.
Patrimonio Nacional dejó de ingresar los 340.000 euros anuales que recibe la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, que financia a los monjes, en 2018, debido a la falta de transparencia de las cuentas de los monjes.
Patrimonio Nacional solicitó a los monjes por primera vez en 2018 que presentaran un presupuesto completo, una petición que fue contestada con una hoja de gastos e ingresos con información incompleta y que concluía en un déficit a cargo del Estado de 600.000 euros, algo lejos de la información requerida.