La Iglesia católica no pasa por su mejor momento tal y como reflejan los datos del CIS que ven como aumenta entre los españoles el número de ateos, no creyentes y agnósticos.
Los datos sitúan en un 38,7% las personas que abiertamente manifiestan no seguir las enseñanzas de Cristo.
En apenas el número de no creyentes ha aumentado en 4,5 puntos. Los católicos alcanzan 56,6%, pero solo el 16,7 son practicantes, el mínimo histórico.
En la franja de edad de 18-34 años existe un 60% de personas no creyentes.
Un estudio de la Universidad de St. Mary de Londres, que se realizó entre los años 2014 y 2016 en 12 países llegó a la conclusión de que la mayor parte de la juventud ya no es creyente.