El cocinero y presentador de televisión Karlos Arguiñano, ha vuelto a hablar sobre política y se ha tirado a la piscina sin contemplaciones en una entrevista con José Yélamo en La sexta noche.
«Vengo del metal, del mundo obrero. Eso no se me ha quitado, lo sigo teniendo. Al final me he hecho empresario, pero tengo el puntito ese de rojillo que tenía cuando tenía 16 años».
Arguiñano explicó que su padre era lo opuesto a él ideológicamente: «Mi padre era muy pobre, pero era de derechas. Y no lo entendí nunca», expuso el cocinero.
«Discutíamos mucho. Estuvo en la División Azul, me negaba el H0L0CAUSTO. Gritándome, claro». A pesar de estas diferencias Arguiñano explicó que tenían buena relación «era un tío super».
El cocinero volvió a lanzar una de sus pullas a la clase política: «No les veo que se unan para el bien común, sino para el bien propio o de sus partidos. No se han unido ni en una pandemia. Cambiaría a todos los políticos y que vengan otros».