El líder del Partido Popular no sale de un lío y se mete en otro. En su encuentro con Feijoó en A Coruña, Casado ha realizado unas polémicas declaraciones que podrían ser objeto de delito.
El líder de la oposición ha manifestado que en Cataluña “hay profesores con instrucciones de no dejar ir al lavabo a niños porque hablan castellano”.
La cosa no se ha quedado ahí, y Casado ha afirmado que “a los hijos de los policías nacionales y guardias civiles se les señala en clase y se dice que no pueden estar integrados” y que a algunos se les meten piedras en la mochila por usar el castellano en el recreo.
El president de la Generalitat ha anunciado una posible querella contra Pablo Casado:
«Els serveis jurídics del govern estan estudiant aquestes declaracions infames. Defensarem sempre la veritat i al professorat d’atacs indecents com aquest. Deixeu l’educació en pau. Prou mentides. Prou d’aquesta baixesa moral. Prou d’atiar l’odi».