El tenista Novak Djokovic será deportado de Australia después de que la Justicia australiana haya desestimado su recurso.
El tenista no podrá jugar el Open de Australia que tendrá dará el pistoletazo de salida el lunes en Melbourne, por no tener su visado en regla.
El serbio no podrá regresar al país en un periodo de tres años salvo por “circunstancias imperiosas que afectan los intereses de Australia”.
El ministro de inmigración del país, Alex Hawke, le retiró el visado por motivos sanitarios y de orden público., tras haber accedido al país sin haber sido vacunado, lo que incumple la legislación Australiana.
Tres magistrados votaron la resolución desfavorable para el tenista.