El actor y exdiputado de UpyD y Ciudadanos que fue colocado a dedo por Ayuso como director del chiringuito del español, Toni Cantó, se ha vuelto a quedar sin trabajo.
La cadena 7NN, afín a las derechas españolas, que pretendía ser una especie de FOX, ha cesado en su actividad un año y medio después de su creación.
El CEO de la cadena, Marcial Cuquerella, ha explicado que no ha podido hacer frente a «los excesivos gastos generados» y ha comunicado que hoy es el último día de emisión por la inviabilidad del proyecto.
De poco ha servido los más de 5 millones y medio de euros de capital que los accionistas inyectaron a la empresa Producciones Audiovisuales Hispania, S.A. de los hermanos José y Jaime Alonso.
En diciembre del año pasado, el exdiputado de Ciudadanos Marcos de Quinto, entró como accionista, pero la situación de la cadena no mejoró.
El espacio más relevante de 7NN era el que presentaba Toni Cantó, que se convirtió en tendencia en varias ocasiones por sus polémicos monólogos, que desencadenaban las mofas en las redes sociales.
Los cambios realizados en la gestión de la cadena no han podido salvar la situación la televisión, que echa el cierre sin más pena que gloria.
En las redes la noticia ha sido acogida con ironía y cachondeo: