El trabajador de 51 años de edad, José Francisco Sánchez Guerrero, que llevaba 27 años trabajando en Mercadona ha sido despedido por compra pollo.
El trabajador compró dos bandejas de carcasas de pollo rural que iban a ser desechadas que estaban rebajadas.
El pasado 12 de septiembre el trabajador estuvo asignado al departamento cárnico y al ver la cantidad de producto sin vender y que sería descartado al final del día, puso el pollo en descuento.
El trabajador se llevó unas bandejas de pollo que iban a ser desechadas y para las que tenía un descuento del 50% que él mismo aplicó, por lo que le costaron 1,25 €/kg en vez de 2,50€/KG.
La compra le salió por 2,51 € en lugar de 5,02€, y la empresa le comunicó el despido con motivo de un «claro ánimo de lucrarse y de beneficiarse de ese precio privilegiado que usted se ha puesto».
Se acusa al trabajador de liquidar «de forma consciente y premeditada» el precio de cuatro bandejas del producto carcasa de pollo rural a un 50% y señala que esto ya es un incumplimiento «muy grave» de los «métodos». «Se descubre que esos productos que liquidó al 50% son comprados por usted al finalizar el turno».
El abogado del trabajador afirma que se han vulnerado sus derechos fundamentales y pide la nulidad del despido, su readmisión, que Mercadona el despido improcedente y una indemnización.
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