Según la propia consejera la nueva ley memorialista tiene un doble fin: «Promover la memoria, el reconocimiento y la reparación de las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura franquista y fomentar los principios, valores éticos y democráticos; la dignidad de todas las personas, los Derechos Humanos, la cultura de la paz, la convivencia, el pluralismo político y la igualdad de género frente a los discursos de la exclusión, la intolerancia o la negación».

«Verdad, justicia y reparación, para garantía de no repetición, estos son los pilares de la nueva Ley de Memoria Histórica y Democrática de Euskadi», ha expresado Beatriz Artolazabal.

«En una palabra, restaurar la memoria de las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura. Nuestro homenaje y nuestro recuerdo emocionado, es hoy. Para quienes durante más de 40 años fueron víctimas de graves violaciones de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario».

La consejera declara que la nueva ley  «mira al pasado, pero sobre todo mira al futuro de Euskadi. Un futuro con memoria, porque la verdad es la mejor garantía para la justicia y para la no repetición. Y la memoria, la verdad, la justicia y la no repetición son patrimonio democrático de todos y todas», explica.

La nueva ley tipifica sanciones  «Para infracciones muy graves: multas entre 10.001 y 150.000 euros; para infracciones graves: multas entre 2.001 a 10.000 euros y para infracciones leves: multas de entre 200 y 2.000 euros».

La celebración de actos y homenajes que conmemoren el franquismo o el golpe militar de 1936, utilizar expresiones que vejen u ofendan la dignidad de las víctimas o familiares de la guerra civil serán tipificadas como sanciones graves.

El proyecto de Ley sobre Memoria Histórica y Democrática de #Euskadi que hoy ha aprobado el @Gob_eus mira a un futuro con memoria. Porque la verdad es la mejor garantía para la justicia y para la no repetición.
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— Beatriz Artolazabal (@B_Artolazabal) July 27, 2021