La familia Franco finalmente ha abandonado el Pazo de Meirás por su propia voluntad hasta que el recurso prestado contra la sentencia del Juzgado de Primera Instancia de A Coruña se resuelva.
El inmueble situado en Sada fue declarado patrimonio del estado dado que fue regalado en 1941 al jefe del Estado, no al dictador a título personal.
La sentencia condenó a los Franco a la devolución del inmueble y les denegó cualquier indemnización por los gastos para el mantenimiento de la propiedad.
Los Franco recurrieron esta decisión a la Audiencia Provincial de A Coruña, pero acepta la ejecución provisional de la sentencia hasta que se resuelva su recurso.